Jubileo: Descanso y adoración
El Jubileo y el descanso
El descanso es una idea importante en la Biblia porque protegía a esclavos, sirvientes y animales del agotamiento cuando no había servicios sociales, vacaciones ni veterinarios; y porque proporcionaba un día para adorar a Dios cada semana con la familia o la comunidad (+info).
No todos nosotros podemos tomarnos un tiempo libre fácilmente, especialmente con tantas personas que tienen varios trabajos o jornadas largas solo para cubrir las facturas. Para quienes están retirados, esto puede no ser posible si tienen responsabilidades de cuidado y otros compromisos. Muchas otras personas no son capaces de realizar un trabajo remunerado debido a problemas de salud o a otras responsabilidades de cuidado, pero ellos tampoco se benefician del descanso.
Ayudándote a ti mismo y a otros a descansar
- ¿Tienes media hora que puedas reservar para sentarte y estar con Dios cada semana o mes?
- Elige un día en el que no abras tus redes sociales a primera hora de la mañana ni tarde en la noche.
- Si vives solo, dedica un tiempo a unirte a un nuevo grupo virtual o presencial, o visita un lugar o edificio local donde puedas relajarte en compañía de otros.
La dimensión social del Jubileo
- Reconciliación: El Jubileo es un tiempo para perdonar y reconciliarse con Dios y con los demás. Es una oportunidad para sanar las relaciones rotas y superar las heridas del pasado.
- Ayuda a los necesitados: El Jubileo es un tiempo para llevar esperanza a los enfermos, a los presos, a los migrantes, a los pobres y a todas aquellas personas que sufren. Es un tiempo para ser testigos de la misericordia de Dios en las acciones cotidianas.
- Inclusión: El Jubileo está destinado no solo a los fieles devotos, sino también a aquellos que se encuentran en situaciones de vulnerabilidad.
- Visibilizar la explotación: El Jubileo es un tiempo para visibilizar la realidad de la trata de personas, la explotación sexual y laboral. Es un tiempo para conocer la labor de la Iglesia y de los proyectos de Cáritas.
- Construir un mundo libre: El Jubileo es un tiempo para construir un mundo de mujeres y varones libres, sin personas explotadas y esclavizadas.
Todos podemos aprovechar el descanso de diferentes maneras
Si estamos descansando mucho, podemos ayudar a otros que necesitan más descanso, ofreciendo cuidado infantil gratuito, algunas comidas, búsqueda de medicamentos u otros servicios en nuestro vecindario y comunidad. Un pequeño gesto puede marcar una gran diferencia en la vida de otra persona.
El jubileo y la adoración
El propósito del Año Jubilar es apartar nuestras ansiedades de nuestras deudas (o de nuestros deudores), nuestros trabajos, nuestras vidas ocupadas, y reflexionar sobre Dios como providente.
Así que, al explorar la posibilidad de implementar el Jubileo por nuestra cuenta, recordamos de quién se trata. Descansamos porque Dios descansó. Perdonamos las deudas porque Dios nos perdonó. Desafiamos a las organizaciones y gobiernos a abordar la esclavitud y la servidumbre porque Dios nos liberó.
Nuestra oración y adoración nos sostienen y apoyan para marcar la diferencia en el nombre de Dios:
- Cuando dedicamos tiempo a leer la Biblia, orar, reflexionar, ir a Misa y aprovechar las numerosas herramientas espirituales de nuestra fe católica, podemos escuchar cómo el Espíritu nos está guiando.
- Reintroduzcan o promuevan las Horas de Adoración existentes en su parroquia y fomenten el foco en el Jubileo, viviendo y actuando en el contexto de la oración.
- Contacten a las asociaciones que se enfocan en la acción social en la comunidad para apoyar a las personas de su parroquia o vecindario que puedan necesitar ayuda o que estén aisladas.
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