Pasos
para abrir un encuentro juvenil
A. Saludo de bienvenida
Se debe procurar que los participantes se sientan en un ambiente de
cordialidad.
B. Presentación de los animadores y de los participantes.
Será sencilla e individual, dando a conocer los nombres de los
animadores y de los participantes. Se recomienda que la presentación
se realice mediante una dinámica de presentación, con el fin de
romper el hielo y entrar en un ambiente de confianza. Esta actividad
se la realizará cuando iniciemos el trabajo con un grupo nuevo, o
cuando queramos que los participantes se familiaricen con sus
nombres.
C. Dinámica rompehielo.
Es importante realizar una técnica con los participantes, con el
propósito de integrar y consolidar al grupo, lo cual lo podemos
lograr mediante dinámicas, juegos, etc. Se busca que los
participantes se sientan en un ambiente de confianza, de integración,
física y mentalmente predispuesto para la actividad. En algunas
ocasiones, si la dinámica tiene relación con el tema a abordarse,
esta puede servir también para presentar el tema.
D. Síntesis del encuentro
Esta actividad se desarrolla a partir del segundo encuentro con un
mismo grupo, es cuando se refuerza el objetivo del encuentro
anterior, mediante la revisión de las ideas centrales y los
compromisos realizados por las personas participantes en el
encuentro.
Pasos
para desarrollar un tema en un encuentro juvenil
1. PRESENTACIÓN DEL TEMA.
En breves palabras se dice a los participantes de la actitud que
deben adoptar, por ejemplo: les hemos preparado un video, una frase,
un refrán; etc. para meditar o reflexionar sobre... el tema.
Se trata de ubicar a los participantes en el tema que se va a
trabajar, mediante frases motivadoras (pueden ser bíblicas),
carteles, refranes, pequeñas historias alusivas al tema, etc.
Contiene una serie de pensamientos motivadores que ubican a
los participantes en la temática general a desarrollarse durante el
encuentro relacionado con el contenido del mismo.
2A. TRABAJO EN GRUPOS.
En este punto son importantes las experiencias que traen cada uno de
los participantes. Es el momento más importante del proceso, se
trata de propiciar el diálogo, el debate, el análisis y la
reflexión de las vivencias de los participantes, hasta la
sensibilización y comprensión de los problemas, para sacar
conclusiones, tomar resoluciones y asumir compromisos.
Los animadores del encuentro se servirá de técnicas activas, con el
fin de dar oportunidad para que
todos participen, propiciando un trabajo activo participativo,
mediante preguntas, análisis de casos (pueden ser
bíblicos) y situaciones que rodean o que involucran a las personas
participantes.
En este paso es importante que las y los participantes compartan sus
experiencias cotidianas en relación al tema que se va a trabajar,
la discusión en parejas o grupos más ampliados ayuda a que los
participantes se den cuenta que no son los únicos que tienen una
experiencia sobre un tema concreto, la multiplicidad de puntos de
vista ayuda entender mejor, con técnicas dirigidas. Es importante el
trabajo grupal, ya que en este espacio se puede visualizar a los
potenciales líderes de grupo, permite motivar y acondicionar al
grupo para que tome una dinámica conjunta.
Este paso es muy importante, por lo que es necesario considerar
algunas recomendaciones:
Las consignas (órdenes, mandatos) que se den a los grupos de
trabajo, deben ser claras, el animador debe asegurarse que todos las
entendieron.
Cada grupo debe nombrar una secretaria/o que coordine el grupo,
debe buscar sobre todo la participación de todos los miembros del
grupo.
.El animador debe rotar por todos los grupos de trabajo, viendo
que todos trabajen y despejando inquietudes que puedan surgir durante
el trabajo.
2B. PLENARIA
Se trata de dar a conocer los trabajos realizados por los diferentes
grupos en el paso anterior, mediante diferentes técnicas como por
ejemplo: sociodrama, collage, periódico mural, noticiero de
televisión, discurso simulado, la elaboración de una carta dirigida
a una persona o personajes bíblicos o de la historia de la Iglesia;
etc.
3. SÍNTESIS Y CONCLUSIONES.
Luego de la presentación de los trabajos realizados por los
diferentes grupos, los animadores hacen un resumen de los puntos
más importantes surgidos en la plenaria y que tengan relación con
el objetivo del encuentro. Así también, los animadores deben
contar con notas de apoyo para socializar y retroalimentar el trabajo
de los participantes. A partir de este paso, se visualizan los
primeros aprendizajes alcanzados por los participantes.
Para elaborar las conclusiones, se puede utilizar la pregunta ¿que
hemos aprendido hoy? Esta pregunta servirá de insumo para la
construcción del paso siguiente.
4. COMPROMISOS.
Es la construcción de una actitud de cambio, está basada en
la reflexión y en la voluntad de los participantes, es buscar
construir una puerta para que los participantes puedan cambiar y
desarrollar hábitos cotidianos de fe que les conducirá a tener
vivencias nuevas. Se debe cuidar que los participantes realicen
compromisos posibles de ser llevados a la práctica.
Los compromisos pueden ser asumidos individual y grupalmente, de
acuerdo al objetivo que nos hayamos propuesto alcanzar. Es importante
que el animador tome nota de los mismos, con el fin de que puedan ser
evaluados en el siguiente encuentro, antes de iniciar con el nuevo
tema. Los compromisos pueden ser trabajados preguntando: de lo que
hemos aprendido hoy ¿Qué vamos aponer en práctica? ¿Dónde?, ¿Con
quienes?
Final
de un encuentro
EVALUACIÓN
Es la forma de conocer y demostrar cómo se alcanzo el objetivo
planteado, partiendo de las intervenciones de los participantes,
conociendo sus expectativas, opiniones sobre el desarrollo del
encuentro y contando con las sugerencias para mejorar.
La evaluación se debe realizar con todos los participantes, con una
actitud crítica, objetiva y transparente. Es importante rescatar los
aspectos buenos y expresar con respeto los aspectos deficientes;
además se debe hacer las respectivas sugerencias. Hay que tener en
cuenta para la evaluación la metodología y los contenidos
desarrollados por los animadores.
Al finalizar un encuentro, es necesario que los animadores pregunten
a las personas participantes: Lo que les gustó del encuentro, lo que
no les gustó y sugerencias para el próximo encuentro.
La evaluación permanente por parte de las personas participantes
ayudará a los animadores a realizar correcciones en la metodología,
u orientar de mejor manera el trabajo en los siguientes encuentros.